B2C es la abreviatura de business to consumer, “empresa a consumidor”, ¿quieres saber más?

El término B2C se refiere a la relación comercial que se establece entre la empresa y el consumidor final, sin intermediarios. Todas las estrategias de marketing que desarrolla una empresa para llegar directamente al consumidor final se encuadran dentro del B2C, un ejemplo muy claro de B2C sería un supermercado.

 

Aunque es una fórmula muy básica de comercio, es habitual encontrarlo asociado al mundo de Internet, que ha aumentado sus posibilidades indudablemente.

 

Internet, con las tiendas online y las plataformas web, ha potenciado el B2C tradicional y, además,  ha posibilitado que muchos negocios B2B se transformen en B2C, es decir, que los productores vendan directamente al consumidor final sin necesidad de la acción de terceros. Sin embargo, siguen existiendo productos B2B imposibles de adaptar al B2C.

 

Por su parte, las redes sociales adquieren un papel fundamental para llegar al consumidor final, se rompen las barreras entre empresa y cliente. Internet beneficia en términos de B2C no sólo a grandes empresas, sino también a pequeñas empresas locales y regionales.

0