La economía sumergida conlleva operaciones irregulares.
La economía sumergida, también denominada como “soterrada”, hace referencia al conjunto de actividades económicas que son desarrolladas de forma irregular por no constar registradas en ningún documento o fichero oficial. Es un término ampliamente utilizado en aquellas situaciones en las que la economía de un país atraviesa un momento de dificultad porque la tasa de desempleo resulta demasiado elevada. De forma que, para evadir las obligaciones pertinentes, muchas personas llevan a cabo trabajos o contratan a empleados sin dar de alta esa actividad.
El inconveniente surge cuando la autoridad pertinente detecta esa situación irregular, por lo que tiene que iniciar una serie de investigaciones que la desvelen, ya sea a través de las estadísticas oficiales o a través de la circulación del dinero cuyas operaciones se encuentran fuera del control estatal. Este tipo de economía suele ser la responsable del llamado “dinero negro o dinero B”, que se caracteriza por ser efectivo y no encontrarse declarado a Hacienda.
