Un buen empaquetado es tan importante como que el sándwich sea sabroso, ¡te enseñamos cómo empaquetar tus sándwiches de una forma fácil e infalible!

¿Has abierto alguna vez la mochila esperando encontrar un bocado delicioso y te has encontrado con una paparrucha incomible? Con este sencillo truco seguro que nunca más vuelves a experimentar una situación como esta.

Para empaquetar un sándwich a la perfección sólo necesitarás una hoja de papel de hornear. Colócala frente a ti y dispón tu sándwich en el centro. Lleva los dos extremos de la hoja a la parte superior, de forma que el sándwich quede envuelto, y ve plegándolos sobre sí mismos. Cuando termines, la doblez tiene que quedar sobre la superficie del sándwich, firme, pero sin estar demasiado apretada. Ahora, usa tus dedos para presionar los laterales izquierdo y derecho hacia dentro, creando un triángulo. Dobla los vértices de cada uno hacia atrás, para dejarlos bajo el sándwich y ¡listo!

 

Y si no quieres ensuciarte las manos al comerlo, parte tu sándwich por la mitad y deja el envoltorio hasta que termines de comer. ¡De esta manera tus sándwiches siempre llegarán intactos a su destino!

 

Imagen: Irv Kagan Photos

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