Frida Kahlo, que fue una de las pintoras mexicanas más conocidas, destaca por sus obras paisajísticas y autorretratos.
Frida Kahlo de Rivera (1907-1954), cuyo nombre completo era el de Magdalena Carmen Frieda Kahlo y Calderón, nació en Coyoacán (México). Es una de las pintoras más destacadas de su tiempo, y más conocida por sus autorretratos. De hecho, en 2002, el director de cine Julie Taymor alcanzó un importante éxito con su largometraje Frida, basado en la vida de la artsita.
Esta gran luchadora, logró vencer en 1913 un brote de la polio o poliomielitis; una enfermedad que le dejó profundas secuelas físicas y psíquicas. Más tarde, tras su estancia en la Escuela Nacional Preparatoria, sufrió un accidente de tranvía que marcaría su futuro. Durante el tiempo que necesitó para recuperarse, comenzó a pintar sus famosos y coloridos paisajes y autorretratos. A los 22 años, se casó con el muralista Diego Rivera, que también resultó decisivo en su desgarradora pintura.
En 1953, tuvo lugar una de sus últimas apariciones públicas en una de sus exposiciones en la Galería de Arte Contemporáneo de México; a la que acudió postrada en una cama por su mala salud. Finalmente, el 13 de julio de 1954 falleció con 47 años; convirtiéndose a finales de los años cincuenta, la Casa Azul, donde vivió y trabajó, en un Museo.
Su vida y obra, estuvieron marcadas por el dolor y la tragedia. De hecho, esta realidad se vio reflejada en sus más de doscientas obras impregnadas de la identidad nacional de su país. Entre sus obras se encuentran: Aún vida con Rosas (1925), Paisaje Urbano (1925), Autorretrato con traje de terciopelo (1926), La Adelita, Pancho Villa y Frida (1927) y El tiempo vuela (1929).