Pastinaca Sativa, ese es el nombre científico de la chirivía. Una hortaliza prácticamente desconocida y, que antes del descubrimiento de la patata, tenía un lugar importante en el consumo habitual de la población.
Los huertos son como la Isla de Utopía, de Tomás Moro, espacios en los que la explotación comunal de los bienes se lleva a cabo sin conflictos ni competencias.
Queremos que nuestra comida sea saludable y, si bien el huerto nos abastece de muchas frutas y hortalizas, aún no hemos conseguido ser autosuficientes completamente.
Con cuatro macetas podemos tener nuestro huerto ecológico en nuestra terraza o balcón.
El huerto ecológico es un espacio que nos permitirá desarrollar otras actividades relacionadas con el medio ambiente y la cocina, de forma respetuosa y sostenible, y una de ellas, es elaborar nuestro propio pan, en un horno solar o de barro.
Es cada vez más habitual, pasear por las ciudades y encontrarnos una huerta en un patio, o un balcón lleno de tomates, ¿moda o fomento del autoconsumo?
Nuestra huerta varía cada mes. Influye el tiempo, el agua, los ciclos de la luna... ¿Cómo es nuestra huerta en julio?
Una vez que nos hemos decidido a cultivar nuestra huerta, tenemos que diseñarla y los bancales son un elemento fundamental.
Llega el otoño, y debemos preparar nuestro huerto para esta nueva temporada en la que disfrutaremos de coles, repollos, acelgas...
Todos y todas somos consumidores, ¿pero lo somos de forma consciente? Formar parte de un grupo de consumo nos permite adquirir conciencia de lo que comemos.
La lechuga se cultiva desde hace más de dos mil años, y sigue siendo uno de los cultivos más apreciados.
Solanum Melongena, una planta con más de dos mil años.
Los tomates son frutos deliciosos y forman parte de nuestra alimentación y, por tanto, también de nuestra huerta ecológica.
El verano se está acabando y tenemos que preparar nuestra huerta para la próxima temporada otoño/invierno. ¿Qué tenemos que hacer?